ARTISTA DE GALERÍA ARTIUM:
OMAR GATICA
Muestra de dibujos recientes hasta el 16 de mayo
La serie de dibujos “Omar Gatica sobre papel” está hasta el 16 de mayo en Galería Artium y es una continuación de la muestra “Yo, pintor” (2009, Museo Nacional de Bellas Artes), por la que el artista recibió la noche del lunes 27 de abril el Premio Altazor en Artes Visuales, categoría Pintura.
Tanto para la producción de la obra en el Museo de Bellas Artes como para la actual exposición, el pintor ha recibido el apoyo incondicional de Galería Artium. “Omar Gatica sobre papel” es la oportunidad para acercarse a una faceta poco conocida. Son cerca de 30 obras creadas entre 2008 y 2010; formatos pequeños y medianos donde surge con fuerza la figura humana.
El reconocimiento llega tras 30 años de trabajo. Gatica emergió a fines de la década del 70, desarrollando desde el neoexpresionismo una obra intensa, de voracidad pictórica y cierta violencia visual, con profundas reflexiones sobre la existencia en el contexto contemporáneo.
El lenguaje del pintor se distingue de los neoexpresionistas conocidos (Bororo, Benmayor, Frigerio, entre otros), porque extrañamente ha oscilado entre el gesto impetuoso y la abstracción, la forma que se deconstruye y el paisaje que organiza. Gatica nunca deja de sorprender. En el Museo de Bellas Artes eran enormes visiones de cuerpos situados en espacios desencajados: una manera de centrarse en las imágenes únicas que lograba a través de sus dibujos.
Esta disciplina le ha servido siempre como ejercicio paralelo a la pintura, con obras que poco se ha atrevido a mostrar: “Siempre he utilizado el dibujo para afiatar la forma. Mi pintura es mucha mancha y, para equilibrar los valores, el claroscuro, utilizo la línea. A veces he expuesto algunos trabajos, pero nunca en forma exclusiva, armando una exposición sólo de dibujos, como ahora”, agrega.
— ¿Cuál es la mirada que surge sobre el ser humano en estos dibujos?
“El ser humano es protagonista y el paisaje donde se inserta es limítrofe, periférico. Es como ver la ciudad desde afuera y a sus habitantes que parecen entes o manchas”.
— ¿Son tan feroces las imágenes como en el Museo de Bellas Artes?
“Se mantiene cierto afán de representar al ser humano como abandonado. Y algo que se ha venido dando sólo en los dibujos del último tiempo: este espacio urbano que me impresiona tanto, la salida de la ciudad. Estos lugares abandonados, de basura, con papeles botados, que usualmente no vemos y donde habitan ciertos personajes o gente en pequeñas casas agrupadas”.
YO, PINTOR
Omar Gatica (1956) se formó en la Escuela de Bellas Artes de la Universidad de Chile, siendo reconocido dentro de la Promoción del 80 (1981, Milan Ivelic, catálogo exposición en Sala BHC) junto a pintores como Ismael Frigerio, Jorge Tacla, Matías Pinto D’Aguiar y Samy Benmayor, entre otros. Desde entonces, ha expuesto en espacios como Galería Arte Actual, Tomás Andreu, Animal, Museo de Arte Contemporáneo, Museo de Bellas Artes, Casa de las Américas (España), Osaka Contemporary Art Center (Japón), Art Fair de Chicago y en la Feria Internacional de GENT, en Bélgica. También ha participado en colectivas en Buenos Aires, Lima, Florencia y Caracas. En forma paralela, ha ejercido como docente en las universidades Uniacc y Finis Terrae.
“Yo, pintor” fue su primera exposición individual en el Museo de Bellas Artes. La muestra no sólo era una mirada brutal sobre la condición humana, también una fiesta de pintura donde retomaba estrategias de los primeros años, en especial, la imagen del cuerpo disgregándose, enfrentado a la muerte y el erotismo. “Yo, pintor”: tal como tituló su tesis en 1984. Así se tocaron dos épocas, reivindicando el texto de juventud, un verdadero manifiesto de la pintura y las coordenadas de su trabajo hasta hoy.
“Mis pinturas muestran estados alterados de crisis desenfrenada”, declaraba en el escrito. El artista con alma de poeta —que entonces amaba la Escuela de Nueva York y la Transvanguardia Italiana— vivió la ciudad a la deriva, las calles en protesta, la represión policial, noches delirantes de conversaciones con otros que también vivían la pintura más con un sentido de lucha que de abandono hedonista: es lo que lo diferenciaba del resto de la corte neoexpresionista.
En los ‘90, Gatica se replegó. Comenzó a trabajar con galerías y su obra se fue ordenando en referencias al paisaje y una abstracción que combinaba gesto, deleite pictórico, composición geométrica y melancolía.
La serie en el Museo representó un desborde desde un sentimiento existencialista, que ahora presenta con más limpieza visual y el gesto al desnudo, a través de sus dibujos en Artium.
GALERÍA ARTIUM - Alonso de Córdova 3102 - Vitacura – Chile /
FECHA: jueves 22 de abril - sábado 16 de mayo de 2010 /
TELÉFONOS: 562 2280954 - 562 2497176 /
HORARIO: Lunes a viernes de 10:00 a 19:00 horas / Sábado de 11:00 a 14:00 horas
Entrada liberada / www.artium.cl
Gentileza de Carolina Lara/ lara.prensa@gmail.com
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